Juan Isidro Inoa
ji2013@hotmail.com
Especial/Noticias A Tiempo.Net
Los patrocinadores de la repostulación del presidente Danilo Medina y los promotores de la división del partido de gobierno (Partido de la Liberación Dominicana -PLD-), han estado entintando cuartillas, gastando horas en radio y televisión, “yigabai” en la web e inundando las redes sociales enrostrando la tasa de rechazo casi cero del presidente Medina y del precandidato presidencial del Partido Revolucionario Moderno (PRM), revelado en la última encuesta publicada por la firma Gallut-Hoy.
Según sus promotores esa encuesta los potenciales candidatos Hipólito Mejía tiene una tasa de rechazo de 22.3% Miguel Vargas y Leonel Fernández de 22.2, Luís Abinader de 0.7 y el presidente Danilo Medina de 0.5.
No es verdad que un hombre en el ejercicio del poder no afecte los intereses de nadie. Ni siquiera de los partidos que lo adversan.
La tasa de rechazo de casi “cero” de Medina es entre línea nos dice que no es amenaza electoral para ninguno de los posibles candidatos. Si se llevara de eso y el partido le acomodara constitucionalmente la repostulación, aparecería el rechazo de la oposición, la llamada “sociedad civil” y grupos de poder que aúpan otros.
La tasa “casi cero” de Danilo es sólo una manera de hacer oposición a la candidatura de un Leonel temido por la oposición.
Una baja de rechazo tasa para un candidato presidencial significa poca importancia de ese candidatos para el proceso. No digo que el presidente Medina no es importante pero para este proceso no lo es por el impedimento constitucional que tiene.
Hasta ahora no he visto un líder de masa que llegue al poder por medio del voto popular con menos de un 20% de tasa de rechazo.
Sin embargo los grandes líderes del mundo que se arraigan en su pueblo tienen alta taza de rechazo porque son amenazas constantes de asunción al poder.
En las elecciones pasadas el candidato presidencial por el Partido Dominicanos por el Cambio (DxC) Eduardo Estrellas tenía un 5.0 % de taza de rechazo y en el proceso electoral quedó entre los últimos lugares. Lo que indica que un bajo rechazo no se traduce en votos. Mientras que Hipólito Mejía que sí tenía una altísima tasa de rechazo por poco saca al PLD del poder.
Una taza de rechazo que se mueva entre el 45 y 55% indica la fortaleza de un liderazgo. De ahí que los grandes líderes como Juan Bosch, Joaquín Balaguer y José Francisco Peña Gómez fueron muy rechazados pero también muy venerados.
La taza de rechazo de un 22 y algo por cientos que tienen Miguel Vargas, Hipólito Mejía y Leonel Fernández indica que la lucha por la presidencia estará entre ellos tres y sus rechazos aumentarán y con ese aumento del rechazo aumentarán las posibilidades de ganar para cada uno porque los votantes se polarizarán.
Llegado ese escenario el expresidente Leonel Fernández tiene la posibilidad de sacar la mayor ventaja por la unificación que mantiene de su partido y la disgregación en que se encuentra la oposición.
Aun con los ojos cerrados para no ver la realidad hay que reconocer que todavía Leonel tiene sus encantos. La gente reconoce sus aportes a la modernización y su figura causa fervor, lo que lo convierte en una figura de primera para el PLD mantenerse en el poder.
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