José Manuel Castillo, director Noticias A Tiempo. Whatsapp: 8098160105, josemlct11@hotmail.com. Santiago, República Dominicana.

martes, 3 de julio de 2012

Ancianos irían a la calle por cierre asilo en Cotuí

Dos de los envejecientes asilados en el Hogar de Ancianos Club de Leones Inmaculada Concepción, fallecieron antes de la transmisión de un reportaje que presentó este drama a través del programa Zona 5, de Telemicro: Dionisio Ortiz y Dolores Agramonte.

Un matrimonio que pasó los últimos días de su vida en este asilo, vio perder a uno de la unión. El esposo, Dionisio Ortiz, trabajó durante años como peluquero para construirle el hogar que luego tuvieron que vender producto de las calamidades y quebrantos de salud con los cuales acabaron sus días finales.

La unión de amor de los ancianos superaba los 50 años. Ya invidentes y con problemas para escuchar, se refugiaban junto a otros 30 envejecientes en el Hogar de Ancianos Club de Leones Inmaculada Concepción, de Cotuí, un centro que cerraría sus puertas en cualquier momento debido a la insostenibilidad económica.

Pero, quizás la incertidumbre aceleró la partida de doña Dolores, a sus 76 años. Dejó sólo a su compañero Dionisio, quien no imaginó que luego de trabajar durante toda la vida, a sus 82 años atravesaría esta tormentosa situación.

Sin ayuda…

José Cruz, presidente del Club de Leones que fundó el asilo, explica que la posibilidad del cierre luego de 11 años de servicios, se plantea ante la interrupción hace ocho años de la ayuda económica de RD$50 mil que les otorgaba la Dirección General de Aduanas.

“Este hogar cubre todas las necesidades de los ancianos; sin embargo, el Ministerio de Salud Pública rebajó la ayuda que nos suministra de RD$36 mil a R$23 mil pesos mensuales, contribución que hace siete meses tampoco recibimos”, añadió Cruz.

La administradora del hogar, Yolanda de la Rosa, afirma que el centro dejó de ser subvencionado sin explicación alguna.

Entre múltiples precariedades, los ancianos subsisten gracias a alimentos donados por la gobernación provincial, la ayuda del Palacio Municipal, el esfuerzo del Club de Leones y otras manos solidarias, según expuso de la Rosa.

“No tenemos electricidad. La luz aquí viene por ratos y carecemos de un inversor”, es una de las quejas de Sor Australia Tavárez Valdez, directora del centro.

Las manos arrugadas, las miradas perdidas, los pasos lentos y cansados de los envejecientes del Hogar de Ancianos Club de Leones Inmaculada Concepción, en Cotuí, evidencian el implacable paso de los años en un país que hoy les niega una vida digna y del que esperan una respuesta urgente por parte de las autoridades

No hay comentarios: