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jueves, 7 de diciembre de 2017

No todos están tan contentos con el nuevo Instituto Dominicano del Café

A juicio de Danilo Severino, presidente de la Asociación Nacional de Profesionales Agropecuarios (ANPA), son muchos los problemas que afectan a los productores nacionales, quienes no se sienten representados por el ministro de Agricultura, Ángel Estévez, quien encabeza esta nueva institución

Marisela Gutiérrez
Fuente, Acento.com.do

SANTO DOMINGO, República Dominicana.- La creación de Instituto Dominicano del Café (Indocafé) ya es un hecho. Danilo Medina promulgó esta semana la ley que sustituye al Consejo Dominicano del Café (Codocafe), a pesar de que organizaciones agropecuarias están convencidas de que cambiarle el nombre a la entidad no renueva el panorama de la producción cafetalera del país.

Según plantea el artículo 6 de la Ley 246-17, uno de los objetivos es crear un instituto para ‘‘fomentar la siembra del café en toda la República Dominicana, de acuerdo con las exigencias del cultivo y las condiciones agroclimáticas’’, así como asesorar en materia de créditos agrícolas a los pequeños, medianos y grandes productores de café’’.

No obstante, a juicio de Danilo Severino, presidente de la Asociación Nacional de Profesionales Agropecuarios (ANPA), son muchos los problemas que afectan a los productores nacionales, quienes no se sienten representados por el ministro de Agricultura, Ángel Estévez, quien encabeza esta nueva institución.

Carmen Suárez/Archivo/Hato Mayor.

Ya a principios de año, el director ejecutivo del Consejo Dominicano del Café (Codocafé), José Fermín Núñez, decía que los caficultores se sentían excluidos de esa nueva institución que buscará, si se aplica la Ley, facilitar la producción; algo que se supone era también el trabajo de la institución eliminada.

El 17 de marzo de este año, Núñez señalaba que el trasfondo de esta nueva entidad era centralizar las políticas cafetaleras. Y que la disyuntiva con el proyecto que impulsó el mandatario, y que en ese entonces se encontraba en el Congreso, era que los productores tendrían que respetar una nueva ley que no los representaba, con la cual se sentía ‘‘excluidos’’.

En ese momento, se hablaba de un proyecto que incluiría apenas un representante de los productores. Esta propuesta se modificó y para la promulgación de la Ley, los hombres del campo tendrían cuatro representantes de la región este, sur, suroeste y noroeste.


Pero la sombrilla que cubre al consejo directivo estará coloreada casi en su totalidad por los funcionarios del Gobierno, algo que manda una señal de temor para ‘‘los de abajo’’, de acuerdo las palabras de Severino a finales del último mes.

Archivo/Carmen Suárez/Hato Mayor.

Después del ministro de Agricultura, la pirámide decae en Medio Ambiente, Obras Públicas y Comunicaciones, el administrador general del Banco Agrícola, el director general del Instituto Agrario Dominicano, el director del CEI-RD, el administrador general del Banco Nacional de las Exportaciones (Bandex), lo directores ejecutivos del Feda e Idiaf, un representante de los exportadores de café, un representante de la industria cafetalera nacional, así como el director ejecutivo de Indocafe.

Los profesionales agropecuarios entienden que el problema no estaba en cambiarle el nombre de una institución. Más bien, esperan se atiendan necesidades concretas como una mejor logística, así como apoyo para la prevención y control de enfermedades y plagas. ‘‘Que se le dé mayor participación a los campesinos y que se valore su cultivo’’, piden los productores.

Aunque la nueva Ley contempla esto, en su artículo 11, los cafetaleros no saben si estos planteamientos caminarán por el campo o se quedarán acostados en el papel.


El Indocafé, que entrará en vigencia en 90 días, deberá tomar las decisiones para mejorar la producción nacional, regulando sus políticas cafetaleras. Actualmente –en palabras de Severino– el 70 por ciento del café se importa desde Vietnam.

Archivo/Carmen Suárez/Finca en Hato Mayor.

‘‘Nosotros estamos en capacidad de preparar, si nos integramos a plenitud, y a trabajar en el control de las enfermedades están afectando, y traer variedades que realmente sean resistentes a los problemas que han diezmado la producción de café’’, manifestó.

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