Por Jesus Galan
El Nacional
Otro fusil que habría sido usado en la matanza de seis extranjeros en el Ojo de Agua de Paya, Baní, fue encontrado por la Policía en La Romana, en poder del civil Gregorio Valerio (Gasolina), implicado en la matanza.
Según explicó el jefe de la Policía, mayor general Rafael Guillermo Guzmán Fermín, se intensifica también la búsqueda de otro civil que se cree salió del país hacia Estados Unidos y que sería pariente del ex teniente de navío Edward Mayobanex Rodríguez Montero, acusado de participar en la matanza de Paya, Baní.
Asimismo, Guzmán Fermín desmintió que dos individuos lograran penetrar hasta la cárcel del Palacio de la Policía con el propósito de asesinar a Rodríguez Montero.
Un periódico matutino que difundió la versión aseguró que el ex oficial habría sido trasladado a la Secretaría de las Fuerzas Armadas y posteriormente a un recinto militar de alta seguridad, donde estaría siendo protegido por un mayor del Ejército Nacional y varios oficiales de la Unidad Antiterrorista y del Grupo Swat.
Una parte del primero de los dos fusiles en poder de las autoridades fue encontrado por buzos de la Marina de Guerra en el Mar Caribe, a donde supuestamente fue lanzado por uno de los implicados en la matanza de Paya.
El arma, un M-16 hallado en las proximidades del Acuario Nacional, dio positivo en la prueba de balística, al igual que la pistola ocupada a uno de los autores del crimen.
Una de las armas usadas en la masacre de Paya fue una pistola marca Taurus, calibre nueve milímetros, ocupada al ex teniente de navío de la Marina de Guerra, Jorge Luis Chalas, quien guarda prisión junto a Rodríguez Montero y otros militares y civiles involucrados en el hecho.
La pistola fue identificada como una de las armas usadas por el ex teniente de navío Rodríguez Montero, quien fue arrestado en el aeropuerto internacional Gregorio Luperón de Puerto Plata, cuando se disponía a abordar un avión de Caribair que lo llevaría a Miami.
La madre de Rodríguez Montero, Gloria Montero, y el abogado de la familia, José Cisneros, denunciaron que al ex oficial naval, preso por su supuesta vinculación en la matanza de siete personas en la comunidad de Paya, Baní, lo tienen secuestrado en la Secretaria de Estado de la Fuerzas Armadas, en donde no le permiten la visita de sus juristas defensores.
Enfatizaron en que Rodríguez Montero está secuestrado y remitieron los periodistas al coronel Cáceres Chestaro, que es el director del J-2, al tiempo que solicitaron que sea enviado a la cárcel de Najayo, como lo establece la medida de coerción dictada en su contra.
Esta versión fue desmentida por el jefe de la Policía, teniente general Guzmán Fermín. Otra versión, atribuida al padre del ex teniente de navío Rodríguez Montero, Ramón Rodríguez, da cuenta de que habría sido sacado en la tarde de ayer de la cárcel en que estaba confinado en la Secretaría de las Fuerzas Armadas, a donde se presentó junto a su esposa para llevarle de comer, y les informaron que un grupo de militares comandados por un coronel de apellido Rijo se lo habían llevado para Najayo.
Por su parte, el Director General de Prisiones, general Manuel de Jesús Pérez Sánchez, también negó ayer la versión de un atentado Rodríguez Montero, quien se encuentra preso en la cárcel de Najayo, y agregó que ignora de dónde salieron esos rumores sobre la supuesta trama.
Pérez Sánchez enfatizó en que no hay ningún problema con el recluso, y reiteró que hubo una desinformación con respeto a un atentado que nunca ocurrió con él ni con ningún otro.
Asimismo, garantizó la seguridad que hay en las cárceles del país, e insistió en manifestar que no sabe de dónde salió esa información, pero que se está investigando su procedencia.
Rumores que circularon el domingo dieron cuenta de un complot en el Palacio de la Policía para matar al ex oficial, lo que habría obligado a trasladarlo a una base militar de alta seguridad.
Según explicó el jefe de la Policía, mayor general Rafael Guillermo Guzmán Fermín, se intensifica también la búsqueda de otro civil que se cree salió del país hacia Estados Unidos y que sería pariente del ex teniente de navío Edward Mayobanex Rodríguez Montero, acusado de participar en la matanza de Paya, Baní.
Asimismo, Guzmán Fermín desmintió que dos individuos lograran penetrar hasta la cárcel del Palacio de la Policía con el propósito de asesinar a Rodríguez Montero.
Un periódico matutino que difundió la versión aseguró que el ex oficial habría sido trasladado a la Secretaría de las Fuerzas Armadas y posteriormente a un recinto militar de alta seguridad, donde estaría siendo protegido por un mayor del Ejército Nacional y varios oficiales de la Unidad Antiterrorista y del Grupo Swat.
Una parte del primero de los dos fusiles en poder de las autoridades fue encontrado por buzos de la Marina de Guerra en el Mar Caribe, a donde supuestamente fue lanzado por uno de los implicados en la matanza de Paya.
El arma, un M-16 hallado en las proximidades del Acuario Nacional, dio positivo en la prueba de balística, al igual que la pistola ocupada a uno de los autores del crimen.
Una de las armas usadas en la masacre de Paya fue una pistola marca Taurus, calibre nueve milímetros, ocupada al ex teniente de navío de la Marina de Guerra, Jorge Luis Chalas, quien guarda prisión junto a Rodríguez Montero y otros militares y civiles involucrados en el hecho.
La pistola fue identificada como una de las armas usadas por el ex teniente de navío Rodríguez Montero, quien fue arrestado en el aeropuerto internacional Gregorio Luperón de Puerto Plata, cuando se disponía a abordar un avión de Caribair que lo llevaría a Miami.
La madre de Rodríguez Montero, Gloria Montero, y el abogado de la familia, José Cisneros, denunciaron que al ex oficial naval, preso por su supuesta vinculación en la matanza de siete personas en la comunidad de Paya, Baní, lo tienen secuestrado en la Secretaria de Estado de la Fuerzas Armadas, en donde no le permiten la visita de sus juristas defensores.
Enfatizaron en que Rodríguez Montero está secuestrado y remitieron los periodistas al coronel Cáceres Chestaro, que es el director del J-2, al tiempo que solicitaron que sea enviado a la cárcel de Najayo, como lo establece la medida de coerción dictada en su contra.
Esta versión fue desmentida por el jefe de la Policía, teniente general Guzmán Fermín. Otra versión, atribuida al padre del ex teniente de navío Rodríguez Montero, Ramón Rodríguez, da cuenta de que habría sido sacado en la tarde de ayer de la cárcel en que estaba confinado en la Secretaría de las Fuerzas Armadas, a donde se presentó junto a su esposa para llevarle de comer, y les informaron que un grupo de militares comandados por un coronel de apellido Rijo se lo habían llevado para Najayo.
Por su parte, el Director General de Prisiones, general Manuel de Jesús Pérez Sánchez, también negó ayer la versión de un atentado Rodríguez Montero, quien se encuentra preso en la cárcel de Najayo, y agregó que ignora de dónde salieron esos rumores sobre la supuesta trama.
Pérez Sánchez enfatizó en que no hay ningún problema con el recluso, y reiteró que hubo una desinformación con respeto a un atentado que nunca ocurrió con él ni con ningún otro.
Asimismo, garantizó la seguridad que hay en las cárceles del país, e insistió en manifestar que no sabe de dónde salió esa información, pero que se está investigando su procedencia.
Rumores que circularon el domingo dieron cuenta de un complot en el Palacio de la Policía para matar al ex oficial, lo que habría obligado a trasladarlo a una base militar de alta seguridad.
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